Y se nos viene otro año!!!

Todos los años digo y escucho decir que el año pasó volando. Mi impresión es que cuando no es fácil contar los logros de un año, pareciera que nada ha ocurrido en él y entonces nos queda esa sensación de que el tiempo voló sin poder detenernos en ningún momento particular.

Este año que se nos va yendo, es de aquellos que en una mirada global no tiene grandes hitos ni sobresaltos. Ha sido un apacible año del perro. Sin embargo y, mirando más de cerca, ha estado muy interesante en mis procesos de conocimiento y crecimiento interiores. He estado madurando cosas, pensamientos, definiciones, vínculos, espacios y todo eso me ha llevado a tener una sensación de éxito y de complacencia que no conocía.

Este año, ha sido el año en que me encaminé hacia el autoconocimiento y la autoaceptación. Seguramente estoy envejeciendo, pero la sensación es indudablemente grata y espero que dure, contra todos los pronósticos que definen el próximo año del jabalí, como emocionalmente complejo para los hijos de ese signo.

En fin y en honor al cambio de año, me parece adecuado hacer listas, pero esta vez, una lista positiva, propositiva. Hace algunos años ya hice una lista de aquello de lo que quería deshacerme y la quemé y la boté al mar y todo fue desapareciendo lentamente entre el oleaje de Cau Cau. Ahora que todo aquello se fue y sólo quedo yo, la lista tiene que ser algo así como.....Yo me propongo:

1.- Oir más y mejor a la gente que quiero

2.- Dejar de oir a la gente que no me interesa

3.- Tener siempre un lugar y un espacio para compartir con Felipe

4.- Mantener mi mente abierta a lo nuevo, lo desconocido y a todo lo que pueda aportar a mi crecimiento

5.- Bajar de peso

6.- Dejarme sorprender.

Que tengan todos un año intenso y lleno de experiencias enriquecedoras.